Un niño perdido

Hace algunas semanas, me encontraba en flat bar, fue un jueves, en que unos amigos me mostraron una canción de no use for a name, “Why doesn´t anybody like me”, era el titulo de la canción, rápidamente me sentí identificado con la canción. Definitivamente, muchos pasamos por eso.
Sobretodo cuando vivimos en una sociedad donde todos son de una manera definida, todos ven lo mismo, todos sienten lo mismo. Pero, que sucede cuando no eres exactamente como el resto de las personas, cuando eres aquel ser que los mira de lejos burlándose mas el de ellos que ellos de el.

Cuando uno tiene quince años, es un poco difícil aceptar eso, aceptar que no te gusta la música que escuchan tus amigos, que no te divierte ir a los lugares donde ellos van, al descubrir que no tienes interés en hacerte el pendejito y dejarte crecer la pelusa que algunos creen que es barba, para que las chicas piensen que ya eres mayor.

Los años pueden ir pasando y vas conociendo gente nueva, gente que si es como tu, gente que ama la misma música que tu, que disfrutan de ir a los mismos lugares que tu, que simplemente, son un poco mas parecidos a ti.

Cuando vas creciendo y llegas a tener 16 las cosas van cambiando, tus amigos viven preocupados de que un granito de esos que delatan su edad aparezca por ahí y pueda espantar a la flaca de la noche. En mi caso, cada ves me fui alejando mas….

Vivir en un mundo donde no encuentres gente precisamente como tu es divertido (y barato también), vivir a lado del camino como lo dice don Fito, fumar el humo mientras ver todo pasar, indagar en tu mente, en recuerdos de una familia feliz a la cual extrañas mas que nada, indagar en tus mas profundos sentimientos y no poder salir de alli no poder dejar de extrañar a alguien, dejar de pensar en cosas que quizas no pasen jamas…

Pero en fin, uno nunca sabe…